Desde hace muchos años asisto al gimnasio como buen Cristiano que soy y he notado algo que realmente me tiene alarmado y quería compartir con ustedes ya que me parece que puede ser una amenaza, sobre todo para quienes tienen hijos adolecentes que son los mas preciados por los gays de gimnasio.
Como ya escribí en otro post, los hombres gay usan
el gimnasio como un lugar para socializar y tener “contactos” secretos en los
baños. Les gusta trabajar sus cuerpos sin la competencia de juego deportivo (por eso no se los ve en el fútbol o basketball).
Después, usan las duchas para participar de actividades sexuales
lejos de las miradas indiscretas de las mujeres.
Pude advertir que un modo de invitar a realizar estas actividades sucias en la ducha es dejar caer la barra de jabón "accidentalmente" al piso y luego agacharse a levantarlo mostrando toda la entrada a su sucia caverna negra.
Si hay otro gay en las duchas entenderá de inmediato el mensaje. Si es usted un buen Cristiano, nada de barras de jabón, compre jabón líquido, de esa forma evitará tener que agacharse en la ducha y llevarse una desagradable sorpresa por la retaguardia.
Si no puede comprar jabón líquido porque es más costoso, una buena solución sería usar jabón en polvo, el mismo que para la ropa.
Sea un buen Cristiano.
Sea un buen Cristiano.