La respuesta es contundente: es posible pero laborioso. Requiere de un gran esfuerzo personal y en ocasiones familiar. Para ejemplificar tomaremos el caso de Cirilo Juarez, a quien llamaremos Juan Pérez para preservar su identidad.
De niño Juan comenzó el camino del mal viendo pornografía y el deseo de placer y supuesta de paz interior le llevaba a buscar sensaciones cada vez más morbosas.
“La pornografía es adictiva, y es progresiva”, explica con lucidez Juan Pérez. “Esto puede ser comparado con la droga. Cuando comienzas a tomarla, empiezas con lo más suave como el alcohol o la marihuana. Entonces se pierde el sentido de lo que estás haciendo y entras a drogas más duras. Lo mismo ocurre con el porno”.
Un día se terminó en un hospital luego de una orgía, y sintió como el demonio lo venía a buscar. El rosario de su madre y el encuentro con Jesús, le hizo cambiar de vida. Cuenta cosas impresionantes de lo que vivió dentro del mundo homogay. Además sugiere la forma de tratar a los homogays para sanarlos.
"Juan Pérez" de 45 años, ex actor porno homogay, ha descrito su propio viaje hacia el núcleo más oscuro del infierno gay a principios de los años 90 en siendo literalmente sodomizado por Satanás. Juan abandonó la escena gay hace 14 años después de una dramática reconversión a la fe cristiana. Dice que su búsqueda de amor y aceptación a través del sexo comenzó con la pornografía. Con tan solo ocho años, un día él ingenuamente hojeó una revista porno dejada por un hermano mayor. Esto fue seguido por revistas porno más gráficas. Luego vino la masturbación y la necesidad de actuar con los demás lo que veía en las revistas (no se avergüenza de reconocer que practicó el vuelo de la mosca y el timón holandés).
Juan dice que lo que él ansiaba era experimentar un nirvana sexual profundo y satisfactorio. Esto lo llevó a ampliar sus aventuras sexuales. Nuevas experiencias sexuales con nuevas parejas fue el único estímulo que parecía ofrecer la emoción que buscaba desesperadamente. Las prostitutas baratas se convirtieron en parte de su rutina sexual.
Pero paulatinamente Juan se aburrió del porno femenino y se trasladó a la pornografía gay. Entonces se dio cuenta de que debía estar con hombres gays para poder satisfacer sus crecientes deseos sexuales. Primero comenzó con encuentros para recién iniciados donde básicamente jugaba un rol de homogay activo a la vez que le practicaban el topo curioso conocido como "el portal al mundo homogay".
Homogays mayores iniciaron a Juan de 19 años en el sexo gay. Él comenzó a visitar los saunas (conocidos antros de perversión) y lo cines porno en busca de sexo homogay anónimo. En su búsqueda de amor y compañía Juan se sumergió muy profundamente en la escena gay. Lamentablemente lo que tan desesperadamente buscada constantemente se le escapaba.
Las llamadas “cabinas teteras” (un lugar para el sexo oral anónimo) ofrecieron la siguiente forma de excitación. Fue en uno de esos lugares que Juan dice que se entregó sexualmente a satanás, quien se presentó en forma de una boca abierta con una lengua larga y conocedora de las mieles del placer. A partir de ese momento Juan comenzó a escuchar voces dentro de su cabeza. Buscando nuevas estimulaciones, se convirtió en un actor porno amateur.
Finalmente se encontró viajando hacia la oscuridad del sadomasoquismo. Allí infligió y recibió dolor y tortura sexualizada. Esto incluye prácticas horrendas demasiado gráficas para describir aquí. La mayor parte de esto fue filmado para la industria del porno gay. El nirvana sexual de Juan podía ahora sólo obtenerse con violencia, dominación y agresión.
Ahora, a sus más de 40 años, dice que lo único que experimentó en su interior fue odio: odio por otros hombres, odio por su vida, y odio por el mundo. A esas alturas ya había experimentado sexualmente con más de 1.000 hombres. Abrazó todo lo que era sexualmente espantoso, horrible e indignante.
Hasta que llegó el día en que una orgía diabólica muy violenta puso a Juan en el hospital. Con su ano desgarrado tuvo una experiencia de la muerte y de su alma bajando hacia una boca abierta y salivante, que él dice que supo que era el infierno. Su fin había llegado.
Pero la madre cristiana de Juan estuvo al lado de su cama, orando fervientemente. El miedo se apoderó del corazón de Juan. No quería entrar en la boca eterna que se había abierto para recibirlo a causa de escoger el pecado para su vida. Dice que pidió la ayuda de Dios y la liberación. En ese momento, sintió que lo trajo de vuelta a su cuerpo.
Fue allí que redescubrió la fe que había abandonado en su infancia. Experimentó el perdón de Dios por sus años de pecado sexual luego de la confesión y pago de diezmos adeudados. Los demonios fueron expulsados de él en un exorcismo realizado como cortesía por un reverendo calificado.
De todas maneras Juan admite que todavía lucha con la atracción hacia otros hombres y con la tentación de masturbarse, pero dice que ha llegado a saber que el amor, la aceptación y la paz que tan ardientemente buscaba al tener sexo con otros hombres, Jesús se la da ahora en abundancia a través de una vida espiritual.
Para Juan, la atracción entre personas del mismo sexo es una cruz que Dios ha pedido soportar a algunas personas por la redención del mundo. Ahora lleva adelante una tienda religiosa católica donde se venden nuestros productos y dice que existe un auténtico gozo en llevar la cruz. Al unir sus sufrimientos a los de Jesús sufriente, cree que está ayudando a salvar a sus amigos gay de una suerte endiablada de la que apenas escapó.
Según Juan, muchos homogays han llegado a él contándole de su infelicidad y sus propias experiencias similares en el estilo de vida gay. Juan dice que habla en primer lugar de su amor por ellos. Luego habla de cómo su encuentro y aceptación del amor de Dios lo salvó del infierno eterno de azufre y dientes chirriantes. Él les dice que el éxtasis sexual gay es momentáneo e ilusorio, pero el amor de Dios es duradero, satisfactorio y real.
Comentarios
No existen homosexuales, bisexuales,transexuales,travestis, heterosexuales, solo sin personas que se enamoran de personas
Sinceramente, desde el punto màs profundo de mi alma, a todos ustedes, personas detràs de este blog, les doy las gracias. Es un blog que me da ayuda cuando màs lo necesito. Cuando estoy a punto de cometer un acto de suicidio porque pienso "ya no queda nada en este mundo por lo cual vivir" "No hay gente que valga la pena conocer".
Este blog es mi salvador.
Cada una de sus entradas son magnificamente... ¡¡¡divertidas!!! No puedo ver la hora de llegar mañana de mi escuela y ponerme a leer las pelotudeces que dicen.
Con falta de argumentos y sobre todo falta de moral, humanidad, amabilidad, y otras cosas importantes que les falta en la cabeza a todos ustedes, presentan entretenimiento de la mejor calidad! Decir que una persona es "hija del diablo" por querer a alguien es lo màs insano que escuché ó leí en mi vida.
No se como pueden vivir asì, despreciando a gente que jamás les hizo daño de algùn tipo, por algo que no les afecta en nada. Ojo, no es una crìtica a su religiòn, si no, a la mente cerrada que tienen. Pobres de sus hijos que tienen que vivir con unos padres como ustedes llegando a tenerles miedo por sus estùpidos valores. "Las 7 razones por las que Dios odia a México", "¿Aborto legal? Muy mala idea". Lo peor es que tambien se meten con los animales... "El Gato Doméstico, Un Centinela De Los Alienígenas Grises". Y bueno, como ejemplo de sus malos argumentos que no se sontienen con nada, les dejo para leer otra vez la entrada de "¿Es Mi Hija Una Lesbiana?".
Sinceramente, desde lo màs profundo de mi corazòn, les pido disculpas, por las personas horrendas que son que nunca podràn ser coherentes y buenas ante la miradad de DIÓS.
Besos